Bizcocho de Zanahoria, {ya tocaba pasarme por aquí!!}

¡¡Hola!! ¡¡Por fin me digno a aparecer por aquí!! ¡¡Puf, de verdad, viendo la fecha de la última entrada, ni me creo que hayan pasado más de 2 meses!! =O =O
La verdad es que muchas veces quieres hacer cosas que te gustarían, pero de repente te ves envuelta en un remolino de tareas por hacer, obligaciones.., de forma que te ves arrastrada por todo eso y el tiempo va pasando sin que te des cuenta...
Toda esta reflexión del tiempo me ha venido porque hoy en clase ha salido como tema el libro de "Momo", (libro que creo que he nombrado aquí en alguna ocasión a raíz de la falta de tiempo..., uno de los males de nuestra sociedad ahora mismo..., bueno, que me voy por las ranas...), y me ha hecho pensar en todo eso de los "Hombres Grises" y su robo del tiempo, de cómo al final vamos dedicando nuestro tiempo a cosas que realmente no merecen la pena. Además que esto siempre suele ser a costa de momentos con los que realmente disfrutas y vas dejando relegadas a un segundo plano: vamos vendiendo nuestro tiempo a los "Hombres Grises"... ¬¬

En fin, que va un poco en relación a lo que decía al inicio de la entrada: que, muchas veces, hay tantos "tienes que" alrededor, que voy dejando de lado muchas cosas que a las que realmente me gustaría dedicarles más tiempo, como este blog o el tiempo para hornear. Así que, para intentar poner un poco de remedio, hoy he hecho un hueco entre todas las obligaciones y exigencias para así poder actualizar por fin el blog y mostraros una receta ultradeliciosa, de esas que tenéis que hacer sí o sí ;D
Una delicia de bizcocho de zanahoria con glaseado. Para la receta, me inspiré en uno de mis libros favoritos, "Las recetas de la pastelería Hummingbird", que siempre salen sí o sí, y de la que realicé alguna modificación para adaptarla más a mis gustos :)
Lo preparé hace algunas semanas para una de mis visitas al pueblo, y fue elegido por una de mis hermanas, que quería que le llevara "carrot cake", jejeje. Está muy internacional ella, =D, así que nada, bizcocho de zanahoria que fue para allá.


Sobre la cobertura añado que fue una de las cosas que cambié, ya que la receta original estaba cubierta por un frosting de queso y azúcar glas. Aunque, como muchas veces ocurre en la cocina, esta vez el frosting no quería salir y tuvo que acabar en la basura =( =(
Ante eso, decidí cambiarlo por un sencillo glaseado de azúcar glas y agua al que añadí posteriormente canela molida por encima y cn eso, os aseguro que no necesita más, porque está realmente bueno.  

¿Os animáis? Pues vamos, que ya veréis cómo tenéis todos los ingredientes ;D
- 300g de azúcar moreno.
- 3 huevos.
- 300ml de aceite de oliva.
- 300g de harina.
- 1 cucharadita de bicarbonato.
- 1 cucharadita de levadura en polvo.
- 1 cucharadita de canela molida.
- 1/2 cucharadita de jengibre molido.
- Una pizca de sal.
- Una pizca de clavo molido.
- 1/4 cucharadita de nuez moscada.
- 300g de zanahorias ralladas.

Para el glaseado:
- Azúcar glass y agua.
- Una pizca de canela molida.
1. Comenzamos precalentando el horno a 180ºC y forrando con papel vegetal el molde, (en este caso, yo utilicé uno rectangular tipo plumcake). Reservamos.


2. En un bol, añadiremos la harina junto con la levadura, el bicarbonato, la sal y las especias. Mezclamos y tamizamos el conjunto. Reservamos.

3. En un recipiente distinto, batiremos los huevos junto con el azúcar hasta hayan aumentado ligeramente su volumen y adquiera textura cremosa.

4. A continuación, le incorporamos el aceite e integramos bien hasta homogeneizar.
Ahora, le añadiremos la mezcla reservada de harina, en varias tandas, e integrando bien cada adición hasta que tengamos una crema uniforme.

5. Por último, le añadimos la zanahoria rallada y distribuimos bien por la masa.

6. A continuación, vertemos la masa en el molde reservado y llevaremos al horno, donde lo tendremos unos 25-30 minutos, o hasta que pinchemos con un palito y éste salga limpio.

7. Una vez listo, sacamos del horno y colocamos en una rejilla, donde dejaremos hasta que se enfríe por completo.

8. Una vez que esté completamente fríos, realizaremos el glaseado: colocar una porción de azúcar glass en un bol pequeño y verter una cucharadita de agua. Mezclar e ir añadiendo más agua según la consistencia que busquemos. Recordar ir siempre poco a poco en la adición del agua, pues si nos pasamos tendremos que tirar de azúcar glass y podemos entrar en un bucle sin fin: azúcar glass-agua-azúcar, jeje :D :D
Una vez conseguida la consistencia buscada, verteremos por encima del bizcocho y espolvoreamos con un tamiz un poco de canela molida por encima.

Y listo, ya tendréis un bizcocho muy agradecido para la merienda o el desayuno ya que, como veis, ni necesita ingredientes raros, ni su elaboración es muy complicada: sólo hay que ir mezclando y al molde, que ya el horno terminará el trabajo =D

El resultado es espectacular: muy jugoso, y con ese sabor de bizcocho de toda la vida junto con las distintas especias. toda una delicia! Mi hermana, dio el visto bueno al mismo, así que..., ya sólo os queda comprobarlo por vosotr@s mism@s.
Y ya me toca ir despidiéndome. Espero que con este bizcocho podáis recuperar, al menos ligeramente, vuestros niveles dulces que seguramente andarían por los suelos. =P 
Sólo espero que la próxima receta no se demore tanto como ésta =( Mientras, os dejo aquí un trocito para vosotr@s ;)
Espero que la semana termine muy bien y que disfrutéis mucho del fin de semana que ya se ve en el horizonte ;)
Happy dance. It´s nearly Friday!

....hasta la próxima recetichi!! =) =)

Comentarios

  1. Hola! Qué bien volver a leerte y ver tus recetas! A nosotras nos encanta el bizcocho de zanahora, estamos deseando probar esta receta! Besis

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares