Rosquitos de leche de doña Julia, {Un poco de repostería tradicional :D}

¡¡Holitaa!!! ¿Qué tal? =) La verdad es que viendo la última entrada, creo que lo primero es disculparme por la ausencia de estas semanas. Han sido unas semanas cargadas de trabajos y examen en la facultad, así que los huecos que iba teniendo en las tardes, los tenía que aprovechar para estudiar o adelantar los trabajos.

Y viendo la fecha, ¡qué barbaridad que estemos ya, no solo a mediados de marzo, sino que estamos a las puertas ya de la Semana Santa! Así que, me parece que nada mejor que acompañar estas fechas con una buena receta de repostería tradicional, de esas que te llevan hacia recuerdos de otra época.
Esta receta de hoy trae también con ella un recuerdo muy especial, ya que cuando mi madre estaba embarazada de mi hermana pequeña, le dio por hacerla al verla en un libro de recetas de monjas que había por casa y me recuerdo yo ahí de pinche, jeje. Recuerdo que salieron rosquitos hasta para un regimiento, jajaja y por más rosquitos que hacíamos, más rosquitos seguían saliendo =D
Desde que comencé a hacer repostería, esta receta siempre la había tenido ahí como pendiente, jeje pero me echaba un poco para atrás el que era un poco liosa, pero este finde, me puse manos a la masa y..., aquí os muestro el resultado ;D


¡¡¡No me digáis que no tienen una supermegapintaza!!! Tan gorditos, taaan blanditoss, tan jugosos... Y es que estos rosquitos tienen truco, (por el que hacen un poco más liosa su elaboración, aunque tampoco una cosa mala, ¿ehn? :D), y es que después de freirlos, van bañados en un almíbar de azúcar y canela, aportándole esa textura taaaan brutalmente buena, jijij :)

La receta está sacada del libro que hay en mi casa de "Los dulces del convento" y lo único que modifiqué fueron las cantidades originales, las cuales reduje a la mitad, jejeej ¡¡No quería estar haciendo rosquitos hasta el fin de los días!! =) Y aún así, me salieron unos 40 rosquitos, jejeje vamos que me he puesto a repartir entre mis amigos y los compañeros del trabajo ;)

¿Nos ponemos ya manos a la masa? Os pongo lo ingredientes que yo utilicé. Si quisiérais hacer más, no tenéis más que duplicar las cantidades ;)








- 4 huevos.
- 150ml de aceite de oliva.
- 250ml de leche.
- Ralladura de un limón.
- 150g de azúcar.
- 8 cucharadas de anís.
- 1/2 sobrecito de levadura en polvo.
- 4 papelillos de gasificantes, (es decir, 2 sobrecitos blancos y 2 sobrecitos morados de los que venden en Mercadona)
- 1kg de harina, (aunque esto irá un poco en función a cada masa. Yo por ejemplo, no llegué a utilizar el kilo entero)

- Aceite de girasol para freír.

Para el almíbar:
- 500ml de agua.
- 100g de azúcar.
- 1 cucharadita de canela.

- Azúcar y canela para rebozar.


PREPARACIÓN:

1. Comenzamos con la preparación de la masa de nuestros rosquitos: en un bol, se batirán los huevos y se añadirá la leche, el aceite, la ralladura, el azúcar y el anís. Se integra todo hasta unificar el conjunto.

2. Por otro lado, en un recipiente distinto, se mezclará la harina junto con la levadura y los gasificantes y se tamizará el conjunto.
Posteriormente, se irá añadiendo ésta a la mezcla previa de los huevos, mezclando y unificando. Primero yo fui mezclando con las varillas manuales y terminé con la espátula para integrarlo todo. 

3. Una vez que la masa esté lista, dejaremos reposar a temperatura ambiente durante 1h más o menos.

4. Una vez pasado este tiempo, procederemos a la preparación de nuestros rosquitos, aunque antes, colocaremos el aceite de girasol en la sartén para que vaya calentándose, (yo creo que aquí reside una de las mayores complicaciones de esta receta: alcanzar el punto óptimo del aceite, de forma que no vaya a quemar al rosquito, pues lo haría por fuera, pero el interior quedaría crudo..., pero que tampoco esté frío, pues empaparía al rosquito de aceite).

Y mientras el aceite se va calentando, igualmente prepararemos el almíbar: colocaremos en un cazo al fuego todos los ingredientes e iremos removiendo, pero sin que llegue a hervir. La cosa es que el almíbar ha de estar caliente siempre que vayamos a bañar los rosquitos en él, de manera que siempre tendremos que ir vigilando que esté calentito.

5. Retomamos la formación de los rosquitos, jeje. Para facilitar la tarea, las monjitas explican que nos echemos un poco de aceite de oliva en nuestras manos, así como encima de la masa, pues facilitará el manejo y la formación del rosquito. Una vez que tengamos las manos con aceite, iremos cogiendo porciones de masa de unos 20-25g, bolearemos y haremos con cuidado el agujerito del centro. Colocaremos encima de papel vegetal mientras el aceite termina de calentarse.
Lo mejor es ir haciendo el proceso por tandas, a no ser que tengas posibilidad de ayuda, que entonces lo podéis ir haciendo en modo cadena, jejeje

6. Bueno, pues una vez que tengamos el aceite listo, (yo para comprobarlo, pongo un poquitín de masa en el aceite y veo cómo responde), vamos colocando los rosquitos en éste y freiremos. Una vez listos, sacaremos y colocaremos sobre papel de cocina para que absorba el exceso de aceite.
Antes de que se enfríen mucho, procederemos al baño de los rosquitos en el almíbar preparado, (que apartaremos del fuego en el momento del baño). Se bañarán de uno en uno y un instante, ya que si nos pasamos, aquello quedará muy apelmazado.

7. Una vez que sacamos del almíbar, colocaremos los rosquitos encima de una rejilla para que se terminen de enfriar y donde se dejarán reposar unas horas.
Iremos repitiendo el proceso hasta que hagamos todos los rosquitos.

8. Una vez que los rosquitos ya estén fríos, y hayan reposado en la rejilla durante unas horas, finalizaremos el proceso rebozando nuestros rosquitos en una mezcla de azúcar y canela.


Y ya sí que sí, lo que quedará será lo mejor de todo: el momento de la cata, jejeje. Uhmm, comerse uno y disfrutar con su textura, su jugosidad, su sabor..., requetedeliciososss, de verdad!!

Lo del almíbar vale que es un extra que puede hacer un poco más engorroso el proceso, pero es que le aportan un punto tan especial, hace que la textura sea tan blandita y tan jugosa, que de verdad os digo que merece la pena hacerlo ;)


¡¡Mirad el interior que pintaza que me trae!! jijij =D


Y vosotros, ¿habéis abierto ya el recetario de dulces para Semana Santa? ¿Qué delicias soléis preparar para esta época? ¿Cuáles son vuestras preferidas? Si os faltan sugerencias, aquí os dejo otras de las recetas que os he presentado en años anteriores para esta época y que alguna intentaré hacer también en los próximos días, (especialmente los rosquitos trenzados, jejej, que ya sabéis que son mi debilidad ;D)


 Que os vaya muy bien el resto de esta semana y que podáis disfrutar de vacaciones la semana próxima. Y que no os falten muchos dulces típicos de estas fechas, jiji ;)

What´s your greatest wish?
....hasta la próxima recetichi!! =) =)

Comentarios

Entradas populares